Revelaciones en el mar

El profeta

El primer capítulo empieza con una frase que me hizo reír bastante: "Aeron Pelomojado estaba ahogando hombres en Gran Wyk cuando le llevaron la noticia de que el rey había muerto." Con dos cojones oye, porque ¿qué hay mejor que hacer que dedicarse a matar chavales cuando tienes tiempo libre? Y lo mejor de todo, hay que resucitarlos después, si no no tiene gracia. 

"Lo que está muerto no puede morir".

Así que a eso se dedica Aeron cuando no está trenzándose algas en el pelo, a "bautizar" a los guerreros de las Islas de Hierro, Dios Ahogado style. Además lo hace con un atuendo de lo más moderno y cómodo, un taparrabos de piel de foca. Sí señor.


En resumen, en este capítulo Aeron se entera de la muerte de su hermano Balon y, a parte, en unos pocos flashbacks y recuerdos nos enteramos de que tuvo ocho hermanos, que Balon fue el mejor y que Euron Ojo de Cuervo no va a ser un buen rey de las Islas del Hierro. 

"He visto la tormenta y su nombre es Euron Ojo de Cuervo"

Sobre todo porque ya ha empezado matando a un par que le quisieron impedir subirse al trono de su difunto hermano.

- El hijo del hierro no derramará la sangre del hijo del hierro.

- ¡Lo mandó ahogar!

- Si lo ahogaron no se derramó sangre.

La verdad es que, igual es cosa mía, pero cuando leo a Aeron me lo imagino como un hombre calmado, que habla con voz tranquila y no se exalta por nada. 


Al final Aeron decide que la única manera de saber quién debe ser el siguiente sucesor sólo se lo revelará el Dios Ahogado por lo que se da un bañito en las frías aguas de las Islas del Hierro y tiene una revelación. El siguiente rey tendrá que elegirse por asamblea, como se había antiguamente, así será la única manera de que vuelvan a hacerse grandes, siguiendo las Antiguas Costumbres. Así que manda a todos a Viejo Wyk a que se reúnan para proclamar al que será el legítimo Rey. Nada de seguir las leyes de las tierras verdes (Westeros).